Respiración de cuerpo completo
Comienza inhalando por la nariz, expandiendo el estómago y contando hasta cinco. Mientras inhalas, visualiza una suave luz cálida llenando tus pies y luego exhala por tus labios mientras cuentas hasta cinco, mientras te visualizas liberando cualquier tensión que pudieras haber estado cargando.
Repite este proceso para los tobillos, las espinillas, las rodillas, etc., hasta la cabeza. Una vez que termines de completar todo tu cuerpo, es probable que te sientas más ligero, más tranquilo y más a gusto.
Mira las nubes
Las nubes casi siempre están presentes, pero siempre están cambiando, al igual que nuestros pensamientos. Por ello, observar las nubes puede ser una excelente manera de desarrollar cierta objetividad. Dedica cinco minutos a observar el cielo, observa lo que te recuerdan las formas de las nubes, ve si puedes detectar movimiento o cambios en la apariencia. Del mismo modo que ellas cambian, también lo hará tu patrón de pensamiento.
Con estos tres simples ejercicios de mindfulness que puedes poner en práctica cada día durante pocos minutos, notarás como cada vez te sientes más lúcido, alegre, activo y despejado. El equilibrio perfecto lo obtendrás con una alimentación saludable. Descubre más sobre ella en nuestra web.